viernes, 7 de mayo de 2010

Qué Complicada es la Vida!

“Qué complicada es la vida” pensamos muchas veces. Últimamente he estado leyendo y viendo muchos artículos y documentales de ciencia y estoy doblemente asombrado, primero por el verdadero nivel de complejidad de nuestra realidad y segundo por la ignorancia que tenemos sobre éste.

En un fantástico episodio de la serie de BBC Horizon que se titula “How Long is a Piece of String?” (Cuál es la longitud de un pedazo de hilo?) el anfritión empieza con un valor métrico simple y al final la respuesta es el fin del Universo. Mecánica cuántica, la posibilidad de que los átomos estén en más de un lugar a la vez y que esto hace posible cosas básicas en nuestra vida… No voy a entrar en detalles, pero en verdad quedé hechizado con toda la información de ese solo capítulo de esta excelente serie.

Piensen en la complejidad de su cuerpo. No sé ustedes, pero después de tener un entendimiento básico de nuestra composición y cómo funciona nuestro cerebro me asombran las dos manos que utilizo para escribir estas líneas. Somos increíblemente complejos y a veces no nos damos cuenta, pero en cualquier momento, aún mientras lees este artículo:

  • Una vena en tu cerebro podría explotar
  • Podrías tener un ataque al corazón
  • Parálisis muscular

O podría ocurrir un terremoto, o caerte un rayo… Pero tranquilo, viste? Has sobrevivido hasta este punto.

Te has puesto a pensar qué hubiese pasado si tu padre no hubiese ido ese día a la feria donde conoció a tu mamá? O qué tal si el día que fuiste concebido a ella le hubiese dolido la cabeza o simplemente el espermatozoide que eras hubiese sido vencido por cualquier otro de los millones con los que compitió? Te imaginas si tu madre no hubiese agarrado tu andador cuando te ibas a tirar por las escaleras? Pero otra vez, tranquilo; todo sucedió y aquí estás, leyendo.

Todos los días formamos y no formamos nuestro presente. Puedes robarte ese semáforo en rojo y apostar tu vida por ahorrarte 20 segundos de ella, pero si mueres, no es por disposición celestial, es porque fuiste un idiota. Pudiste estar cruzando tu semáforo en verde en el preciso momento que un idiota se roba la luz y te chocan, la culpa no es de los 5 minutos que tardaste buscando una camisa antes de salir, el culpable es el idiota.

Mi punto es que vivimos en un Universo con una cantidad increíble, indescriptible de variables y posibilidades. Una infinidad de cosas podrían pasar o no pasar en tu vida; la arrolladora mayoría de ellas no dependen de ti, enfócate en afectar las poquísimas que sí están en tus manos.

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